Abogado, literato, orador, agente revolucionario, el doctor Alfredo Zayas y Alfonso llevaba recorrida, por 1908, toda una escala de servicios públicos: juez municipal, sub-secretario del despacho, concejal, convencional, senador, miembro de la Comisión Consultiva. Elegido Presidente de la República en las elecciones da primero de noviembre de [920 —elecciones empañadas por actos indudables de violencia gubernamental—, el doctor Zayas, hombre ecuánime y de firmes sentimientos democráticos, quiso y supo conservar en las alturas del poder el mismo amor apasionado por la libertad que antaño le habla llevado a los presidios españoles. El bueno del doctor Zayas tuvo que afrontar la agitación producida por la batalladora asociación de Veteranos y Patriotas, movimiento cívico de prole st a que degeneró a la postre en un pronunciamiento armado. El Presidente Zayas reprimió la revuelta con rapidez y sin derramamientos de sangre y pudo asegurar al país que la República había dejado atrás el grave peligro de una lucha f raticida. La tolerancia del doctor Zayas permitió excesos en la expresión de pensamiento rayanos en el libertinaje; pero devolvió al pueblo cubano la sensación de que de nuevo le era lícito moverse y producirse sin riesgos ni cortapisas embarazosas.
Fuente
Referencias
[1] Wikipedia – Alfredo Zayas y Alfonso
[2] Diario de Cuba – Aciertos y desaciertos: Alfredo Zayas
[3] Cuba Constitucional – Alfredo Zayas y Alfonso. (1921-1925)